Si somos polvo de estrellas es que nacimos para brillar. Cuando miras a las estrellas, estás mirando a tus ancestros, pues somos hijos de las estrellas, como también lo son la propia tierra y todo lo que habita en ella. La mayoría de los elementos de los cuales estamos hechos o que nos permiten vivir: […]
«Lo que está sucediendo es la vida, la que está dentro y la que está fuera de ti; y la experiencia es distinta dependiendo de la posición desde la cual la experimentes: desde el interior hacia el interior o desde el interior hacia el exterior. Y según dónde sitúes tu percepción, la sensación será diferente. Están los dos polos
«El poder está dentro de ti». He decidido empezar poniendo la frase: “el poder está dentro de ti» porque es una frase mundialmente utilizada, en google tiene más de 200.000.000 millones de resultados; y llega por todos los canales: el visual, el auditivo y el sensitivo (corporal-cinestésico o propioceptivo). Mediante el canal visual, la podemos
Lo que te imposibilita y te posibilita la vida es un conglomerado mental propio y subjetivo que emite fuerzas de atracción y evitación continuas a lo largo de todo tu campo de acción. Ese conglomerado, creado desde el conglomerado de otras personas ajenas a ti mismo es la sopa que te nutre diariamente o te
«Nos levantamos, seguimos y caemos al mismo tiempo. Forma parte del juego de la vida, una carrera de obstáculos autoimpuestos que vemos magnificados porque no observamos el camino en sí, solo vemos los obstáculos. Si ampliáramos la perspectiva y viéramos todo el camino, caminaríamos en consecuencia y no daríamos importancia a las caídas, que no
Cuando casi todos duermen, yo me levanto y me dejo envolver por la madrugada que se levantó todavía antes que yo permitiéndome saborear la vida y alargar el tiempo degustándola y degustándome. Y me dejo llevar de la mano a disfrutar de sus momentos mágicos del instante presente, dueños de la precisión que semarchan cuando, sin
Cuando pasabas por allí, nadie se hacía eco de tu existencia. Tenías un alto grado de invisibilidad y de imbecilidad, que te habías autoimpuesto para desaparecer ante los ojos de los eternos «jueces de la nada». Parecía que nada te importaba de aquel lugar, de aquella gente y siempre volvías la mirada hacia otro lugar